Hola como están, algunas cosas compartió nuestra Ingrid Cruz
en sus historias de Instagram, estaba hermosa en su patio sin maquillaje con
sus ojos verdes preciosos, y una polerita rosada, nos dijo “se me olvido por
completo mi teléfono, hice mil cosas, tengo que arma el arbolito, pero por lo
menos en mi casa o en Chile no lo sé, siempre se arma el 8 de diciembre, no sé
si esperar hasta el lunes, ya lo saque, lo limpie, me faltan todas las luces,
las luces es lo más cacho en realidad, pero en esa ando, hoy día fui al
supermercado presencial, no iba hace mucho rato al supermercado presencial,
pase por un chino, y jejjejee mil cosas, ahora tengo, ven acá!! no comas
flores, esta otra come flores por eso se enferma de la guata, mañana grabo así
que tengo que estudiar, feliz jueves, creo”
“luna llena hoy!!!”. También compartió una historia donde sale junto a
Vivianne Ditz revisando la edad que suman las canciones de sus spotifys, la de
Ingrid suma 77 años y se reía mucho, y tambien aprovecho de mostrar el podcast
de Di La Verdad Rosa
Me encanta cuando sus ojos verdes se ven así al sol,
chinitos, verdecitos y bien de cerca cuando pone la cámara bien de cerca en su
carita, se la había olvidado saludarnos pero aprovecho muy bien la mañana, hizo
mil cosas, hace tiempo que no iba al supermercado de forma presencial, siempre
encarga por internet y con despacho a domicilio, hace tiempo que no vemos al
weon de las paltas o a pyme que le llevaba las verduras, también aprovecho de
sacar el arbolito de navidad de la bodega, lo limpio, lo armo, le queda todo el
tema de las luces que como dice ella es lo más cacho que hay pero algunos como
yo nos encanta desenredarlas, pero tambien aprovecho de pasar a un mall chino y
seguramente compro luces y adornos. Que risa cuando con Vivianne sumaban las edades que tenían sus canciones
en spotify, la de Ingrid suma 77 y la de Vivianne 55, claro porque Ingrid
escucha mucha música de los años 60, 70, 80 y ahí para delante, se reía y decía
que era una abuelita, andaba con ese mismo vestido verde de ayer, se le ve
mejor de ánimo siempre con esa carita y esa sonrisa maravillosa. Que hermoso
primer beso entre Salome y Alamiro, se sienten como don Quijote y Dulcinea,
pero pucha que va sufrir cuando descubra que realmente se llama Rolando y no es
un señor del siglo pasado, feliz viernes

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