Salome ayuda a Ayelen a comprar mercadería para el hombre de la montaña, sigue muy enojada con Braulio

Salome y Ayelen salen del almacén, Salome lleva una pesada mochila cargada con mercadería, chao gracias, que dios me lo bendiga!!, mija, no quiere que yo la acompañe? Mire que entre el arroz y los tallarines y los enlatados esta pesado esto, yo la acompaño ahí donde el Ayelen men… el hombre de la montaña, Ayelen no la deja, no tay loca pásame pa acá, si no esta tan pesado, Salome la ayuda a ponerse la mochila, pero no solo lo digo por el peso mija, no vaya sola, déjeme acompañarla por favor se lo pido, Ayelen dice, escúcheme, mientras menos gente sepa donde vive el HDLM mejor, y así si te preguntan mejor porque no teni que mentir no más po, Salome dice, no si yo ni bajo tortura hablo mija, así que confié, y ahora me voy andando para volver lo más rápido posible, cualquier cosita Salome, si la señora Mariana te llega a preguntar por mi tú le deci que yo ya termine mi turno, que no tenía a nadie más agendado y me fui para mi casa, ya confía en mí no me va a pasar nada, Salome le toma las manos, ya dígame bendiciones, que dios me la bendiga mija y el manto del a virgen me la bendice para que nada malo le pase!! Vaya con cuidado!! Por favor!!, Ayelen se va, si ahí te cuento. Justo poquito más allá esta Braulio descargando las botellas, se da cuenta que pasa Salome al lado de la furgoneta, hola Salome!!, ella se da media vuelta y dice molesta, usted no me mire, no me hable ni me nombre!! Que yo con usted no quiero nada!!, Braulio dice , pero como, todavía sigue enojada conmigo?, Salome dice molesta, como no voy a estar enojada con usted, si viene y me agarra y me da un beso todo brusco sin mi consentimiento ¡!! No están los tiempos mijo, no están los tiempos!! Además usted está bien peludito como hombre para andar haciendo cosas de niño, crezca!!!, Salome se da vuelta y sigue caminando